19 ottobre 2007

L'Honduras delle bande chiude la bocca al Frijol

Hanno ammazzato El Frijol, Il Fagiolo. Il "Fagiolo Terribile". Così si intitolava il programma dell'umorista hondureño Carlos Salgado a Radio Cadena Voces. Frijol el Terrible. La voce del Fagiolo denunciava senza troppi mezzi termini, dicono i suoi colleghi, la situazione nel paese, "principalmente la pobreza". Prendere le difese dei poveri contro i ricchi dà quasi sempre fastidio, specie quando a farlo non è il solito ricco populista di turno, che farà sempre gli interessi dei suoi pari, ma un giornalista satirico. Carlos lo hanno ammazzato i soliti quattro mercenari armati fino ai denti, una misura necessaria per un signore di 67 anni che aveva un'arma sola, la lingua. E dopo averlo lasciato in una pozza di sangue davanti alla porta della stazione radio, da cui stava uscendo, verso le quattro e mezza del pomeriggio, sono saliti sul loro Toyota Four Runner e se ne sono andati "sin que nadie hiciera algo para capturarlos."
Nelle settimane scorse alcuni colleghi di Cadena Voces erano stati denunciati da Marcelo Chimirri, potente capo della telco locale Hondutel. In agosto, un'altra giornalista di RCV, Carolina Torres, aveva rivelato che in una intervista il presidente dell'Hondura, Manuel Zelaya, le aveva detto testualmente: "Si yo fuera Hugo Chávez, ya hubiera cerrado esa radio". Il direttore dell'emittente Dagoberto Rodríguez, ha già dichiarato che El Frijol è stato fatto fuori perché il lavoro di Cadena Voces dà troppo fastidio. Purtroppo è così, il lavoro dei giornalisti e dei commentatori satirici da quelle parti - e non solo da quelle parti, mi pare - a volte risulta fastidioso. Zelaya ha vinto le scorse edizioni di una nazione lacerata negli ultimi anni dalla criminalità organizzata in bande che il passato presidente Ricardo Maduro affrontava con mano spietata quanto inefficace. Zelaya, liberale, ha sconfitto l'avversario Porfirio Lobo, nazionalista. Ma la vittoria arrivò di misura, malgrado i sondaggi molto favorevoli, e il partito liberale resta in minoranza rispetto al partito nazionalista unito agli immancabili cristiano-democratici. Insomma, tutto molto controverso, le bande criminali, i potentati e la corruzione non abbassano la cresta, la povertà avanza, i disastri naturali impazzano, la gente fugge dal paese e ai giornalisti, quando va bene, si mette la mordacchia con denunce ed esplicite minacce da parte di varie "guardie private". Reporter sans Frontieres riferisce che quando i tribunali assolvono i giornalisti accusati di "diffamazione", le guardie fanno fuori i loro avvocati. Ora è la volta di Fagiolo il Terribile, per lui la mordacchia è stata al piombo, la migliore.
Per la cronaca, Cadena Voces è stata ricevuta in Italia su 1290 kHz da Renato Bruni, un breve sprazzo di audio qualche mese fa, costato lunghe settimane di paziente identificazione (sulle prime l'annuncio era parso "Cadena 12"). La cronaca che segue è comparsa oggi su El Heraldo, un giornale locale, ma la triste sorte del commentatore radiofonico ha fatto il giro del mondo.

SUCESOS: Atentado
Frente a Radio Cadena Voces matan a “Frijol el Terrible”

Hampones le dispararon en las afueras de la radio. Por constantes amenazas a muerte, comunicadores habían solicitado protección a Seguridad y nunca se les proporcionó

El humorista y periodista Carlos Salgado, de 67 años, popular por su programa radial “Frijol el Terrible”, perdió la vida ayer frente a las instalaciones de Radio Cadena Voces, luego de que cuatro hampones le disparan cuando salía de la sala de grabación. El hecho ocurrió a eso de las 4:45 de la tarde, precisamente en el momento en que abandonaba el edificio donde funciona la emisora, en el bulevar Morazán.
Los malhechores abrieron fuego con armas automáticas contra la humanidad del comunicador, quien cayó mortalmente herido. De inmediato fue trasladado a una clínica privada en un intento de salvarle la vida, pero los esfuerzos de los médicos resultaron infructuosos porque los proyectiles le afectaron partes vitales del cuerpo.
Tras cometer el crimen, los presuntos sicarios se dieron a la fuga en una camioneta marca Toyota Four Runner, color gris, sin que nadie hiciera algo para capturarlos. Minutos después aparecieron los oficiales de la Dirección General de Investigación Criminal (DGIC) y de la Unidad de Análisis de la Jefatura Metropolitana 1 en la escena del crimen.
Levantaron evidencias y más tarde llegó el comisario Héctor Iván Mejía, vocero de la Secretaría de Seguridad, diciendo que ya seguían la pista de los sospechosos. Mejía fue recibido con fuertes reclamos de parte de periodistas que desde hace varios días habían solicitado seguridad por las constantes amenazas que reciben, ya que el medio ha lanzado fuertes críticas al gobierno actual.
Semanas atrás, los periodistas Juan Carlos Funes y Melissa Amaya, coordinadores de la casa de radio, fueron querellados por el gerente de Hondutel, Marcelo Chimirri. El periodista Octavio Carbajal, quien coordina programas en Radio Cadenas Voces, también tuvo que salir del país porque, pese a solicitar seguridad oficial, se le denegó.
“Tengo grabadas las amenazas que se hicieron contra mi persona y mi familia, pero nunca me dieron seguridad”, dijo Carbajal. Salgado fue un humorista contundente y mordaz que inició a comienzos de los años 80. Su programa, donde destacaban los personajes del “Frijol el Terrible”, “Gañote” y “El Lépero Patrón” barría con la audiencia nacional. Hasta ayer, los cuerpos de investigación policial no manejaban información en torno a los móviles del sangriento suceso.

CONSTERNACIÓN

Fue llevado a un hospital privado, donde falleció por la gravedad de las heridas.
El trágico deceso de Salgado generó consternación en el gremio periodístico, así como en miles de radioescuchas que deleitaban sus oídos con las historietas humorísticas del hoy occiso. El director de Radio Cadena Voces, Dagoberto Rodríguez, lamentó el hecho y cuestionó la inseguridad ciudadana. Manifestó que el programa de Salgado era jocoserio, crítico y que quien escuchaba “Frijol el Terrible” notaba que criticaba el statu quo o la situación que impera en el país, principalmente la pobreza.
“Esa -agregó- es la tónica de nuestra radioemisora, un periodismo beligerante y distinto; no sabemos si fue a raíz de esa situación que se perpetró este atentado en contra de Carlos Salgado”. “Lo lamentamos, nos preocupa a todos los periodistas, a nuestro equipo de prensa, y ya estamos tomando las medidas para reforzar la seguridad en nuestra empresa, y también vamos a solicitar la protección del Estado, porque esta situación podemos tomarla, por lo pronto, como un atentado al trabajo que ha venido haciendo Radio Cadena Voces”, expresó.
Por su parte, el periodista Edgardo Escoto afirmó que “no es la primera vez que los periodistas recibimos amenazas; yo, cuando cubría desde casa presidencial, el mismo día que fue enterrado el edecán del presidente, me mandaron un mensaje donde me dijeron que me iba a pasar lo mismo que a él”. La muerte de Salgado ocurre en momentos en que la libertad de prensa enfrenta una situación difícil y la delincuencia tiene de rodillas a la ciudadanía en general. Salgado expiró en un centro hospitalario privado.

“FRIJOL” Y “GAÑOTE”

Carlos Salgado inició su carrera artística a finales de los años 60 en Radio Capital con su personaje “Calixto el Telefonisto”. Años después le dio vida a “Frijol el Terrible”, con el que, con su lenguaje cotidiano y popular, hizo críticas fuertes a la realidad del país.
Los personajes de Salgado se escucharon en las frecuencias de las radios Capital, Comayagüela, Tegucigalpa y Cadena Voces. En esta última había comenzado a grabar nuevos programas radiales. En opinión de Miguel A. Cálix Martínez, “Frijol el Terrible” y su inseparable amigo “Gañote” eran el vivo ejemplo de la picaresca local y su lucha por la supervivencia en un mundo hostil.
Subempleados y sometidos a los designios del clásico patrón tramposo, explotador y bien conectado, siempre aguardaban una llamada telefónica de la “agencia de empleos La Holgazana” (donde trabaja el que le da la gana), para poder hacerse de unos centavos llevando a cabo esforzados trabajos, algunos absurdos e inimaginables.
El conspicuo hijo de “El Zanjón” (donde cualquiera se va al cajón) y su inseparable amigo nos regalaron inolvidables aventuras, de las cuales la mayoría de las veces salían bien librados. “Frijol” y “Gañote” fueron “guachimanes”, panaderos, policías, estilistas, vendedores ambulantes, astronautas, payasos, adivinos, jardineros y hasta políticos…
Uno de los capítulos más memorables es precisamente aquel en que “Frijol” asciende al alto cargo de alcalde de su pueblo natal y, emulando al Sancho Panza cervantino cuando fuera gobernador de la ínsula Barataria, administra la corporación municipal con buen humor (“ja, je, ji, jo, ju...”), sentido común y singular sabiduría (“adelante va el conejo, más atrás va la guatuza”), siempre en beneficio de sus pobres coterráneos.
Cabe reconocer que “Frijol” no gobernaba solo: se hacía aconsejar del fiel “Gañote”, quien por haber estudiado hasta el tercer grado de primaria consideraba tener argumentos suficientes para asesorar a su compañero. Carlos Salgado explicó que “El Zanjón” es Honduras y “‘Frijol’ es un hombre de pueblo. ‘Frijol’ es el pueblo”.

1 commento:

Anonimo ha detto...

El gobierno del presidente Manuel Zelaya, políticos y poderosos empresarios de la comunicación se trenzan en una encarnizada guerra por el millonario mercado de las telecomunicaciones, en la que los intereses de la empobrecida población de Honduras no cuentan.

Son pocos los que piensan que el asesinato de este periodista sea un asesinato político, sobre todo porque desde siempre "Frijol" ejerció la crítica social en sus programas. Pero este hecho es aprovechado para acusar - aunque no abiertamente- un gobierno que no tiene norte, pero que por eso no es capaz de defenderse ante la acometida de grandes empresarios de la comunicación. En Honduras la mayor parte de la prensa es una prensa tarifada, que chantajea para publicar y para no publicar. Los gobiernos lo saben y pagan para sobrevivir.